Sintetizando las membranas neoplasmáticas del organismo se puede llegar a la conclusión de que existe gente demasiado pelotuda. Por que creer que este mundo gira en 360 grados? Sera acaso por las vueltas que damos cuando tenemos que decir una cosa, o quizás porque no tenemos el coraje de ponernos en pelotas en la calle y gritar "Aguante la cumbia".
Cuestiones que uno en la vida se cuestiona, valga la redundancia. Seamos mas libres, mirémonos al espejo y creamos que cada uno de nosotros es partidario de la libertad. Dicha libertad define nuestros actos primarios, donde nos hacían vestir de negros sin dientes que vendían empanadas calientes. Y que calientes que vivimos hoy en día, donde todo es porno en la televisión argentina. Culo por acá, teta por allá, vagina que se escabulle bajo un leve tejido. Tanto vaginismo sin siquiera pensar en aquellos años donde la mujer apenas se depilaba y no estaba tan expuesta.
Muchas son las reflexiones que podríamos hacer en este momento, pero la mas importantes de ellas es la libertad como concepto único e irrevocable.
Somos todos libres. Somos todos pelotudos. En el fondo, bien en el fondo, existe un grado de pelotudez inmensa en el ser humano. Lo terrible es cuando se muestra en su estado mas puro.
Seamos menos pelotudos y mas libres.